COMO CURAR TU OLLA
Tratamiento inicial
Antes de ser utilizada por primera vez, la olla de piedra jabón debe ser curada. Se trata de un tratamiento sencillo y único: el propio uso se encargará de su mantenimiento.
- Con un cepillo o una toalla de papel, frote un poco de aceite de cocina o grasa vegetal por toda la superficie de la olla, por dentro y por fuera. Engrase también ambos lados de la tapa de piedra. Deja descansar una noche.
- Al día siguiente, llene la olla con agua caliente o tibia y póngala tapada en un fogón, con la llama más baja posible. Lleve el agua a ebullición y déjela hervir durante aproximadamente dos horas.
- Retire la olla de la cocina y deje que se enfríe naturalmente hasta la temperatura ambiente. A continuación, lávela para retirar el exceso de aceite.
Su olla ya está lista para el uso.
- Para curar una parrilla o una bandeja para pizzas, engrásala con aceite por ambos lados y llévala al horno a 180ºC durante 40 minutos. Deje que se enfríe naturalmente hasta la temperatura ambiente y luego lávela para eliminar el exceso de aceite. NOTA IMPORTANTE: si las asas fueran de baquelita, destorníllelas antes del tratamiento y vuelva a atornillarlas después del mismo.
Tras el curado, la piedra cambiará de color, tornándose más oscura, pero dejando en evidencia los dibujos típicos de la piedra. En el caso de que el color no quede del todo uniforme, se podrá repetir el tratamiento. En todo caso, el uso y el contacto con los alimentos harán que la piedra se oscurezca a lo largo del tiempo.
Uso y conservación
El tratamiento inicial de la piedra sólo sirve para preparar la olla para su primer uso en el fuego, y no es una garantía contra la rotura posterior debida a un uso incorrecto. Para evitar posibles grietas debidas a la contracción y expansión de la piedra, es fundamental no someter la pieza a cambios de temperatura repentinos.
La durabilidad e integridad de la piedra jabón depende de una simple precaución: EVITAR LOS CHOQUES TÉRMICOS. Caliente siempre la olla a fuego lento, espere que se enfríe antes de lavarla, no coloque la olla caliente sobre superficies frías. EVITE DE USARLA PARA FRITAR EN LOS PRIMEROS USOS.
Los utensilios de piedra jabón se pueden lavar fácilmente a mano o en el lavavajillas. A pesar de su propiedad de antiadherencia natural, la piedra jabón no es como el teflón. En caso de que algún residuo de comida se quede pegado en el fondo, basta con sumergirla en agua durante diez minutos para que se desprenda sin esfuerzo.
Evite el uso de utensilios afilados para mezclar y servir la comida, utilice de preferencia cucharas de madera, plástico o silicona. En caso de que ocurra algún arañazo en la piedra, o si desea dejarla con su color gris natural, será suficiente lijarla con una lija de grano fino.
